Mi concierto de manolo García

Después de unos años de espera y con alguna cancelación y otros avatares el 13 de octubre de 2024 por fin conseguí ver a Manolo García, antiguo miembro de El último de la fila.

Su andadura en solitario le ha dejado varios éxitos en las listas más relevantes. Tenía ganas ya de verle.

Desde el Wizink Center, mon amour, Manolo sale puntual a su encuentro con su público de Madrid, donde es querido como si fuera hijo predilecto.

Comienza con Insurrección, himno por excelencia en su repertorio. Buah, impresionante, los pelos electrizados.

La gente está entregada.

Con una guitarra colgada y tocando sus hombros inicia apoteósicamente. Continúa con Nunca el tiempo ha perdido. Tema que estará siempre en nuestras mentes.

Sigue con otros grandes éxitos.

Llegamos hasta Rosa de Alejandría, una preciosa canción que nos trae buenos recuerdos. De ahí a un solo de guitarra española, que enlaza con la mítica Pájaros de barro. El Wizink se viene abajo. Impresionante. increíble temón. El público totalmente entregado. Buah qué emoción... pufff. Qué sencillez para triunfar.

Carbón y ramas secas es la que continúa y en la siguiente se baja a pista para entremezclarse con la gente. ¡Hasta el medio de la pista! Es un genio medio loco, maravilloso y adorable. ¡Qué pasó, Manolo!

Seguimos con varios éxitos.

Hasta llegar a San Fernando, un ratito a pie... Y el pabellón acaba por estallar con la complicidad de Manolo bajándose a la platea, dándose un baño de multitudes.

Un tema más con una bailaora y continúa con Un burro amarrao, continuando con el éxtasis del Wizink.

Acaba todo su amplio repertorio con Prefiero el trapecio, con esa complicidad de sus fans vocalizando con gran armonía y similar fuerza final de concierto volviendo a mezclarse con su gente en la pista.
Los bises son dos canciones de temas populares, que consigue que la fiesta acabe por todo lo alto.

Espectacular concierto, Manolo García.